En el ámbito empresarial lo único persistente es el cambio. Lo que hoy parece que funciona, puede no hacerlo en unos años, por lo que debemos estar abiertos a cualquier periodo de transformación.
De hecho, un ejemplo de ello es el cambio de prioridades en el entorno laboral; pues actualmente la satisfacción que da el dinero fruto de una ocupación ha quedado relegado y sustituido por otros factores como estar en un buen clima laboral, donde todas las opiniones importan y son tomadas en cuenta, por ejemplo.
Se podría decir que la mayoría de las personas no están dispuestas a invertir su tiempo solo por dinero. Y es en este contexto, en el camino hacia la transformación cultural, en el que la diferencia entre un líder y un jefe se hace notoria.
¿Alguna vez has pensado qué tipo de director o directora quieres ser? Descubre cómo liderar este cambio y dejar de dar órdenes para empezar a guiar a tu equipo compartiendo un objetivo común.
Conceptos clave
Pero antes de comenzar con las diferencias entre estas dos ideas contrapuestas, es necesario saber exactamente a qué hacen referencia para entenderlas mejor.
Liderar
Es la capacidad de mantener una relación de confianza y compromiso entre un dirigente y sus empleados. La comunicación interna es un factor fundamental para poder conseguir los objetivos comunes fijados. Todos comparten la misma visión de la empresa y trabajan para el beneficio mutuo.
Dar órdenes o, lo que es lo mismo, mandar
Como la RAE predispone, “dicho del superior: Ordenar al súbdito”; por lo que hace referencia a la acción de impartir órdenes por parte del dirigente y esperar a que estas se cumplan a la mayor brevedad posible. No existe una comunicación abierta y bidireccional fluida y el jefe es entendido como la máxima autoridad.
El cambio es la única cosa inmutable”.
Arthur Schopenhauer
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Principales diferencias entre una dirección tradicional y una basada en los pretextos del liderazgo
Líder vs. jefe
Y es que existen muchas diferencias entre estos dos tipos de directivas, ¿quieres conocerlas?
Estas son algunas de las mayores diferencias entre ser un buen líder e impartir órdenes:
#1. Organización horizontal vs. vertical
Y la mayor de las diferencias es la capacidad de adaptarse a estructuras colaborativas horizontales en las que todos los profesionales participan en un ambiente de confianza y punto de unión. A diferencia de las estructuras verticales en las que hay superiores y subordinados, se toman decisiones de manera unilateral y autoritarias sin prestar atención a otras voces.
#2. Confianza y relaciones laborales
En este punto es clave la comunicación. Como hemos señalado en el apartado anterior de este artículo, trabajar para mejorar la comunicación interna de una empresa u organización es necesario e imperativo, en especial, si lo que se busca es crear lazos de confianza y bienestar dentro del equipo.
De esta manera, todos los profesionales que forman parte de este sentirán que su voz importa y trabajarán para conseguir los objetivos fijados. Llevar una escucha activa y abierta del directivo hacia sus empleados es fundamental para convertirse en un líder y dejar de dar órdenes. Y una de las principales diferencias entre un líder y un jefe.
#3. Forma de analizar los resultados
Mientras que un jefe analiza el trabajo realizado en función de los resultados conseguidos, lo que puede conllevar a un clima de estrés, tensión y ansiedad. Un líder evalúa los resultados teniendo en cuenta todo el proceso, desde la forma de abordar la tarea, así como todo el proceso posterior hasta lograr o no los resultados esperados.
El aprendizaje es continuo en el ámbito empresarial, y de los fracasos se puede aprender mucho. Pero, para ello, es importante analizar todo el desarrollo para identificar los puntos fuertes y débiles de un equipo. Y trabajar para mejorar estos últimos.
#4. Éxito y responsabilidad
Y, por último, nos gustaría destacar la capacidad de asumir el éxito entre estos dos sujetos.
Mientras que el jefe asume todos los éxitos cuando las cosas van bien, un líder comparte el éxito con su equipo, así como los fracasos.
Ahora ya conoces algunas de las mayores diferencias entre un líder y un jefe o, lo que es lo mismo, liderar y dar órdenes. ¿Estás preparado para asumir este reto y convertirte en un líder para tu equipo?
Si tienes dudas, puedes ponerte en contacto con nosotros y te ayudaremos a protagonizar este cambio en tu empresa.
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